En la entrada de hoy, nuestro tren recorre a media noche las tierras de Georgia, deja atrás la llanura tranquila y serena y enfila hacia territorios inhóspitos adentrándose en los escarpados parajes del éxito y el fracaso, alumbrándose con el farol del amor.
En 1973, Gladys Knight y sus fantásticos Pips grabaron la que se convertiría en uno de los mayores éxitos de la "Emperatriz del soul" y que suena en la entrada de hoy del cuaderno de bitácora del comandante y nos acompaña en este viaje con su potente y negra voz.
La canción nos cuenta la historia de un hombre que llega a Los Ángeles (podía haber llegado a cualquier otro lugar) para intentar cumplir sus sueños y alcanzar el éxito dejando atrás todo lo que había conocido hasta entonces.
Es una mujer, su amada, la que nos narra cómo ha visto truncados sus sueños, se da cuenta que ese sueño no es como él lo había imaginado y coge el tren de regreso a su mundo, pero eso sí acompañado por ella que "prefiero vivir con él en su mundo antes que en el mío sin él" (¡bendito fracaso!).
Este temazo nos provoca una reflexión; ¿hay que renunciar a todo nuestro sencillo y tranquilo mundo, con las cosas que nos gustan y nos hacen felices para alcanzar el éxito que la sociedad en que vivimos nos ha vendido y ser considerado por todos un triunfador?
En 1973, Gladys Knight y sus fantásticos Pips grabaron la que se convertiría en uno de los mayores éxitos de la "Emperatriz del soul" y que suena en la entrada de hoy del cuaderno de bitácora del comandante y nos acompaña en este viaje con su potente y negra voz.
La canción nos cuenta la historia de un hombre que llega a Los Ángeles (podía haber llegado a cualquier otro lugar) para intentar cumplir sus sueños y alcanzar el éxito dejando atrás todo lo que había conocido hasta entonces.
Es una mujer, su amada, la que nos narra cómo ha visto truncados sus sueños, se da cuenta que ese sueño no es como él lo había imaginado y coge el tren de regreso a su mundo, pero eso sí acompañado por ella que "prefiero vivir con él en su mundo antes que en el mío sin él" (¡bendito fracaso!).
Este temazo nos provoca una reflexión; ¿hay que renunciar a todo nuestro sencillo y tranquilo mundo, con las cosas que nos gustan y nos hacen felices para alcanzar el éxito que la sociedad en que vivimos nos ha vendido y ser considerado por todos un triunfador?
¿Es mejor ser considerado un fracasado pero vivir en el entorno sencillo que nos gusta, en el hábitat que consideramos nuestro y que nos proporciona la felicidad junto a la persona amada?
Yo lo tengo claro, me cojo el próximo tren de medianoche a Georgia.
¡Salud, que disfrutéis el viaje y que éste os lleve a donde deseéis estar!
2 comentarios:
Excelente análisis, muchas gracias por tu valioso tiempo que invertirse en dar a conocer tan interesante letra, saludos.
Gracias a tí por tu visita.
¡Salud!
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