miércoles, 29 de julio de 2020

Forever young - Bob Dylan & The Band





No volveré a ser joven

Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
–como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.

Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos
–envejecer, morir, eran tan solo
las dimensiones del teatro.

Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.

Jaime Gil de Biedma (Poemas póstumos, 1968)


domingo, 26 de julio de 2020

Esto no es una canción - Victor Manuel




Patrioterismo esclerótico

Nuestra patria, tan rupestre y literaria,
tan encastrada en los señoritos de la casta ganadera
y clerical,
tan aficionada a políticos de palabra vasta
y banderita de “su patria” en la muñeca.

© El Roto
Esa patria de marrón arcilla, paraíso de barraca
y reconciliación construida en cuelgamuros,
sobre cimientos podridos por dentro
mientras por fuera, se pulen y pintan
(de azul, verde y naranja).

Nuestra patria, con sus amplias costas,
sus playas blancas y montañas verde hojalata,
nuestra patria,
se aferra a una tierra mojada y parda,
a un fino hilo de luz escarlata, a un niño yuntero,
a una gastronomía con estrellas de carretera,
aceituneros altivos entre olivos heridos,
a las parvas de trigo rubio y azada al hombro,
al contraste de los túmulos sin montaña,
a los verdes campos de golf
sembrados en la frontera,
junto a una valla muy alta.

Vuestra patria, también sería la mía
si lo patriótico fuese
acceder al lugar más alto de ella
para dotar las nacionalidades que la forman
con los recursos naturales extraídos de la tierra,
del cielo azul por donde vuela el viento,
de los ríos y afluentes que empujan los sedimentos
hacia la ribera de esta patria nuestra,
tan meseta, tan multicolor, tan solidaria,
tan diversa y expoliada
durante los años del miedo.

Javier Delgado Gallego


¡¡ESTO NO ES UNA CANCIÓN, ES UN CORTE DE MANGAS!!


jueves, 23 de julio de 2020

Yes, i have ghosts - David Gilmour




A principios de los 60, la isla griega de Hydra en el golfo Sarónico al lado oriental del istmo de Corinto, acogió una comunidad de artistas expatriados, inconformistas y bohemios que encontró en ese fantástico paraje un refugio donde darse a los placeres de la vida alejada del ruido y del mundo de ese tiempo. 

En las terrazas, alumbrados con lámparas de aceite y en las trastiendas de los colmados prolongaban las noches hasta el amanecer y se adelantaban en una década a la revolución hippie que llegaría a estas tierras de casas encaladas y calles empinadas y empedradas a la sombra de las buganvillas, guardadas por puertas de colores y poderosos picaportes, bañado todo ello por el azul del cielo y la luz del Egeo. Los coches no existen y el principal medio de transporte es el burro y su principal atracción es que forma un oasis de sencillez, calma y vida relajada. 

Personajes como Allen Ginsberg, Mick Jagger, Jacqueline Kennedy, Sofia Loren y un largo etcétera recorrieron las calles de este paraiso perdido, pero tal vez su residente más célebre fué el cantautor y poeta canadiense Leonard Cohen. 

Cuando llegó a la isla aún no había saltado a la fama pero allí comenzo a dar los primeros pasos hacia ese reconocimiento mundial que llegaría años después. Allí conoció a su amada Marianne y en esta especie de comuna dedicada a la creación cultural, compuso So long Marianne (1967) y Bird on wire (1969), entre otras muchas canciones que luego sería conocidas a nivel mundial. También escribió su libro de poemas Flowers for Hitler (1964) y sus novelas The Favourite Game (1963) y Beautiful Losers (1966). 

En abril de 2020, la escritora británica Polly Samson publicó la novela A theatre for dreamers que recrea esos días de los años 60 de esos artistas y creadores en esa isla griega. 

Polly está casada con el guitarrista y voz principal de los míticos Pink Floyd, David Gilmour y cuando comenzó la pandemia estaban trabajando en un audiolibro de la novela con relatos en la voz de Polly y canciones de David (muy a pesar de todos los fans de Pink Floyd, Gilmour se ha convertido en el némesis del otro genio creador de la mítica banda, Rogers Waters; algún día habrá que dedicar un ratito a esta lucha de egos. Lo bueno es que la música que acompañará el relato será de Pink Floyd y supondrá un auténtico placer para el oido). 

Ahora sale a la luz una de esas composiciones de Gilmour con letra de Samson y acompañada por el arpa y la voz de su hija Romany (preciosa voz, por cierto).

No es la primera vez que su mujer compone para David, de hecho lleva haciéndolo desde hace 30 años tanto en sus trabajos en solitario, como con Pink Floyd y, la canción que suena hoy en el blog, supone la primera del genio de Cambridge en cinco años y realmente evoca, además del espíritu, un poco la música e incluso la voz de Leonard Cohen. 

Espero que disfrutéis la canción y que os lleve a encontrar vuestra particular Hydra y aleje los fantasmas que todos llevamos en nuestro interior. 

¡Salud e Hydra para todos!  

lunes, 20 de julio de 2020

Sacramento - Middle of the road





Vamos a ser felices


Vamos a ser felices un rato, vida mía,

aunque no haya motivos para serlo, y el mundo

sea un globo de gas letal, y nuestra historia

una cutre película de brujas y vampiros.

Felices porque sí, para que luego graben

en nuestra sepultura la siguiente leyenda:

“Aquí yacen los huesos de una mujer y un hombre

que, no se sabe cómo, lograron ser felices

diez minutos seguidos.”

                   Luis Alberto de Cuenca (Madrid, 1950)

viernes, 17 de julio de 2020

That's life - Frank Sinatra





Hoy nos vamos al cine y rememoramos la escena del film "Joker", donde Arthur Fleck es invitado al programa de televisión de Murray Franklin. La charla se convierte en una confesión y Arthur pone de manifiesto que el sistema, con su culto al poder y al éxito, a la uniformidad y a lo políticamente correcto, provoca las desigualdades e injusticias que, en ocasiones, generan monstruos que ni puede ni quiere controlar, y se lava las manos dejándolos abandonados a su suerte.


Arthur Fleck: Han sido semanas difíciles, Murray. Y más desde que maté a esos tres tipos de Wall Street…

Murray Franklin: Estoy esperando el final…

Arthur Fleck: No hay final, no es ningún chiste

Murray Franklin: ¿Lo dices en serio? ¿tú fuiste quien mató a los tres jóvenes del metro? ¿y por qué deberíamos creerte?

Arthur Fleck: No tengo nada que perder. Ya nada puede hacerme daño, mi vida no es más que una comedia

Murray Franklin: A ver si lo he entendido, ¿crees que matar a esos jóvenes tiene gracia?

Arthur Fleck:  Sí, y estoy harto de fingir que no la tiene. La comedia es subjetiva, Murray, ¿no es eso lo que dicen? Vosotros, el sistema que tanto sabe, decidís que está bien y qué no, del mismo modo que decidís qué tiene gracia y qué no.

Murray Franklin: Vale, ¿quieres decir que lo has hecho para iniciar un movimiento? ¿para convertirte en un símbolo?

Arthur Fleck: ¡Vamos Murray! ¿te parezco un payaso capaz de empezar un movimiento? Maté a esos tíos porque eran horribles, todo el mundo es horrible hoy en día, suficiente para que todos nos volvamos locos

Murray Franklin: Entonces es eso, estás loco, ¿esa es tu justificación para matar a tres jóvenes?

Arthur Fleck: No, no cantaban para salvar sus vidas ¿que se le va a hacer?

[El público murmura y abuchea]

Arthur Fleck: ¡Oh! ¿Por qué están todos tan disgustados por lo de esos tres? Si hubiera muerto yo en la calle habríais pasado por encima de mí, nadie sabe ni que existo pero esos tres, ¿por qué? ¿porque Tomas Wayne ha salido por la tele lamentando su pérdida?

Murray Franklin: ¿También tienes un problema con Tomas Wayne?

Arthur Fleck: ¡Sí, claro que sí! ¿Has visto cómo está la cosa ahí fuera, Murray? ¿Sales alguna vez del plató? Todos van por ahí gritándose, chillándose. Ya no hay gente civilizada, nadie es capaz de ponerse en el lugar del otro, ¿crees que los hombres como Tomas Wayne se han puesto alguna vez en el lugar de alguien como yo, en el lugar de alguien que no sean ellos mismos? ¡¡No. Se creen que vamos a quedarnos de brazos cruzados, de callarnos como pánfilos, que nunca va a salir la bestia que llevamos dentro!!

Murray Franklin: ¿Has terminado? ¡No dejas de autocompadecerte, Arthur, intentas justificarte por haber matado a esos chicos. No todo el mundo, te lo aseguro, no todo el mundo es horrible!


Arthur Fleck: Tú eres horrible, Murray.

Murray Franklin: ¿Yo, horrible? ¿Ah, si? ¿Por qué soy horrible?

Arthur Fleck: ¡Poner mis imágenes, invitarme al programa, solo pretendías reírte de mí, eres igual que todos!

Murray Franklin: Tú no sabes nada acerca de mí, mira lo que ha pasado por tu culpa, a dónde hemos llegado, hay disturbios en la calle, dos policías están muy graves y tú te estás riendo, hoy han matado a alguien por lo que hiciste.

Arthur Fleck: Lo sé [ríe]
¿Qué tal otro chiste, Murray?

Murray Franklin: No, no queremos más chistes. ¡Llamad a la policía!

Arthur Fleck: ¿¡Sabes qué es lo que pasa cuando, a un enfermo mental, la sociedad le da de lado y lo trata como si fuera escoria!? Yo te diré lo que pasa, que tienes lo que te mereces ¡cabrón!

[Arthur saca la pistola y dispara en la cabeza a Murray]

[El público grita y huye despavorido]

[Arthur, con la cara ensangrentada, ríe, se levanta, dispara a Murray en el pecho y deja la pistola en la mesa, hace un bailecito y se acerca a la cámara]

Arthur Fleck: Buenas noches, y recordad siempre… ¡Así es la vida!


martes, 14 de julio de 2020

Hold you in my arms - Ray LaMontagne





 
 La piel

La piel, de no rozarla
con otra piel, se va
agrietando...

Los labios, de no
rozarlos con otros
labios, se van
secando...

Los ojos, de no
mirarse con otros
ojos, se van
cerrando...

El cuerpo, de no
sentir otro cuerpo
cerca, se va
olvidando...

El alma, de no
entregarse con toda
el alma, se va
muriendo.


Bertolt Brecht (1898-1956)



sábado, 11 de julio de 2020

Send me an angel - Scorpions




Tu secreto

exactamente ahora
he abierto la puerta
y gritado tu nombre varias veces

pero tampoco hoy nadie
ha respondido a mi llamada

traía tantas cosas que contarte
que me he sentado solo
en el sofá de mimbre de la abuela
ahí frente al chinero
que guarda todavía
la porcelana del día de tu boda
y me he puesto a decírselas
a tu lugar vacío

aunque hablara con lengua equivocada
tú asentías con la benevolencia
y el placer del que ignora
las palabras ajenas que no entiende

pero tú eras la sabiduría
y tu secreto
una efímera calma
sobre el mantel de hilo

me ofrecías café y yo seguía
conversando en silencio con tus ojos
buscaba una respuesta que tardaba en llegar

procura ser feliz con lo que hagas

ya ves la voz elige siempre
el golpe justo
su propio asentamiento

en la carencia
en la desposesión

Ángel Campos Pámpano (San Vicente de Alcántara, 1957 - Badajoz, 2008)



miércoles, 8 de julio de 2020

Still got the blues - Gary Moore




Último brindis

Lo queramos o no
sólo tenemos tres alternativas:
el ayer, el presente y el mañana.



Y ni siquiera tres
porque como dice el filósofo
el ayer es ayer
nos pertenece sólo en el recuerdo:
A la rosa que ya se deshojó
no se le puede sacar otro pétalo.

Las cartas por jugar
son solamente dos:
El presente y el día de mañana.

Y ni siquiera dos
porque es un hecho bien establecido
que el presente no existe
sino en la medida en que se hace pasado
Y ya pasó...,
como la juventud.

En resumidas cuentas
sólo nos va quedando el mañana:
Yo levanto mi copa
por ese día que no llega nunca
pero que es lo único
de lo que realmente disponemos.

                    Nicanor Parra


domingo, 5 de julio de 2020

Happiness - The Fray




«No sé qué ni cómo, pero me parece que más que nada gracias a estos cielos (de vez en cuando pienso, que aunque por supuesto lo he visto todos los días de mi vida, nunca antes había visto realmente el cielo).

Este otoño vivido he tenido algunas horas maravillosamente plenas –¿o acaso no podría decir que han sido perfectamente felices?–.

Según he leído, Byron, justo antes de su muerte, le dijo a un amigo que en toda su vida sólo había conocido tres horas felices. También está esa vieja leyenda alemana sobre la campana del rey, con la misma idea. Mientras estaba en el bosque, con una hermosa puesta de sol entre los árboles, pensé en Byron y en la historia de la campana, y surgió en mí la impresión de que estaba teniendo una de esas horas felices. (Aunque tal vez mis mejores momentos nunca los he apuntado: cuando llegan no puedo permitirme romper el encanto con registros acuciosos.

Simplemente me abandono a ese estado de ánimo, lo dejo ser y me entrego a su éxtasis placentero).

¿Qué es la felicidad, de cualquier manera? ¿Es una de estas horas o algo parecido? Tan impalpable… ¿Un simple aliento, una tinta que se desvanece? No estoy seguro, pero me daré a mí mismo el beneficio de la duda.»


Esto escribía Walt Whitman en una página de su diario el 20 de octubre de 1876. Tenía 57 años y seguía añadiendo versos a su gran obra, "Hojas de hierba", de la que ya había publicado 2 ediciones y unas cuantas más verían la luz en años posteriores.

Nos habla de la felicidad, esa sensación que todo el mundo persigue pero que nadie sabe exactamente qué es, tal vez no sea lo mismo para todos, no sé...

Sea lo que sea, ¡Salud y que alguna vez conozcáis la felicidad!


jueves, 2 de julio de 2020

Ya hozna - Frank Zappa




En Estados Unidos, desde 1985 y hasta mediados de los años 90 del siglo pasado, existió lo que se denominaba Centro de Recursos Musicales de Padres (PMRC son sus siglas en inglés), formado por las esposas de varios diputados. Entre ellas figuraba Tipper Gore,  la esposa del entonces senador Al Gore, que posteriormente llegaría a ser vicepresidente con Bill Clinton.

La función de este comité era la de educar a los padres sobre las modas alarmantes que, a su juicio, existían en la música popular y afirmaban que el rock apoyaba y promovía la violencia, el consumo de drogas, el suicidio y toda una serie de conductas criminales y alejadas del buen comportamiento (una prueba más de la doble moral  de los estadounidenses y su modo de vida).

Uno de los músicos que más activo se mostró en la lucha contra la censura de este comité fue el protagonista de nuestra entrada de hoy.

Frank Zappa, guitarrista, compositor, productor musical, director de cine, cantante italoamericano siempre fue un tipo muy alejado del prototipo de estrella musical de la época. Aunque tiene varios discos que los expertos consideran fundamentales para la historia de la música rock y siempre se le consideró como un cantante y guitarrista muy original y con un estilo propio, lo cierto es que su éxito fue limitado, en Europa más que en el resto del mundo, y eso le permitió ser un músico independiente toda su trayectoria musical.

Tocó y compuso música de muy diversos estilos, lo cierto es que cultivó casi todos los que existían, incluso muchas de sus creaciones serían difícilmente clasificables en un estilo concreto, era Franz Zappa.

Para ser conscientes de lo absurdo de la censura, no solo en Estados Unidos sino en todo tiempo y lugar, podríamos destacar el hecho de que el álbum "Jazz from hell" grabado por Zappa en 1986, se editó con una pegatina que  dice: "Aviso para padres:letras explícitas", lo cual no resultaría raro si no fuera por que el disco es completamente instrumental...

La canción que suena hoy en el blog forma parte del disco de 1984 "Them or Us", y está llena del humor y la ironía del genio de Baltimore. Está repleta de mensajes que en realidad no quieren decir nada, son frases sin sentido, muchas de ellas en alemán, grabadas al revés y que buscan provocar y reírse de los censores.

Es fácil imaginar lo bien que debió pasárselo Zappa grabando este tema e imaginando a los guardianes de la moral intentando atisbar en ella mensajes malignos e invocaciones a Satán.

Hay dos frases de Frank Vincent Zappa que ponen de manifiesto su modo de pensar y su filosofía de vida: "Sin desviarse de la norma el progreso es imposible" y "Si tienes una vida aburrida y mediocre es por haber escuchado a tu mami, a tu papi, a tus profesores, a los curas o a algún tipo en la televisión diciéndote cómo hacer las cosas ¡Así que te lo mereces!"

¡Salud y disfrutad en libertad de la vida que elijáis!