Continuamos transitando por este tórrido y sofocante agosto, acompañado por nuestras mujeres en forma de canciones. Para el día de hoy vamos a recurrir a todo un clásico del rock and roll y a uno de esos éxitos, a nivel global, que han sonado a lo largo del tiempo y del espacio.
Corría el año 1979 cuando Doug Fieger, guitarra rítmica y voz, y Berton Averre, guitarra principal, componían este tema que acabaría siendo el hit más internacional de la banda californiana The Knack. Es rápidamente reconocible y pegadizo su riff de guitarra que había sido escrito por Berton mucho antes de entrar a formar parte de la banda.
Según Fieger está inspirada por una chica que conoció en Los Ángeles y de la que se enamoró locamente. Esa chica se llamaba Sharona Alperin y es la que posa en la carátula del single que se publicó en Junio de 1979.
Sharona era una colegiala que asistía a los conciertos del grupo y que trabajaba en una tienda de ropa donde conoció al bueno de Doug. Mantuvieron un romance durante 4 años, hasta que Sharona rompió la relación con Doug debido a los problemas de este con el alcohol. A pesar de eso, siguieron siendo amigos e incluso estuvo junto a él el día en que Doug Fieger dejaba este mundo, el 14 de febrero de 2010.
El tema ha estado presente en la banda sonora de un buen puñado de películas y en cualquier recorrido que se haga por la historia del rock y de la cultura del siglo pasado.
En el año 2005 se conoció, no sin cierta sorpresa, que el tema formaba parte de la lista de reproducción del iPod del expresidente de los EEUU, George W. Bush, lo que supone una prueba más de que la música, y en concreto el rock and roll, es capaz de penetrar incluso en las mentes más rancias y reaccionarias.
También supone un indicio de que el amor ha sido uno de los acicates fundamentales que ha empujado al ser humano en la consecución del arte y de la belleza en sus creaciones.
Y ahora que todos conocemos un poco mejor a Sharona, a The Knack y al origen de su canción, sólo queda disfrutar de este tema icónico del rock y que el amor os empuje a lograr vuestras más bellas creaciones en todas las facetas de vuestra vida.
¡Salud y amor por siempre!
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