Gracias a ti
cada uno de mis días es un mundo limpio y perfumado que huele a melón.
cada uno de mis días es un mundo limpio y perfumado que huele a melón.
Gracias a ti
todos los frutos se ofrecen a mi mano como si yo fuera el sol.
todos los frutos se ofrecen a mi mano como si yo fuera el sol.
Gracias a ti sólo pruebo la miel de la esperanza.
Gracias a ti late mi corazón.
Gracias a ti
mis noches más solitarias son como un kilim de Anatolia
que sonríe desde la pared.
mis noches más solitarias son como un kilim de Anatolia
que sonríe desde la pared.
Gracias a ti
al final de mi camino, sin llegar a mi ciudad,
he descansado en una rosaleda.
al final de mi camino, sin llegar a mi ciudad,
he descansado en una rosaleda.
Gracias a ti,
no dejo entrar a la muerte que con sus cantos llama a mi puerta
vestida con sus más sutiles ropajes y me invita al gran descanso.
no dejo entrar a la muerte que con sus cantos llama a mi puerta
vestida con sus más sutiles ropajes y me invita al gran descanso.
Nâzim Hikmet (Turquía, 1902-1963)
2 comentarios:
Qué belleza de entrada! Toda completa!
Muchas gracias! Me alegra que te guste. Un saludo
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