A mis hijos
Queridos Hildita, Aleidita, Camilo, Celia y Ernesto:
Si alguna vez tienen que leer esta carta, será porque yo no esté entre Uds.
Casi no se acordarán de mi y los más chiquitos no recordarán nada.
Su padre ha sido un hombre que actúa como piensa y, seguro, ha sido leal a sus convicciones.
Crezcan como buenos revolucionarios. Estudien mucho para poder dominar la técnica que permite dominar la naturaleza. Acuérdense que la revolución es lo importante y que cada uno de nosotros, solo, no vale nada. Sobre todo, sean siempre capaces de sentir en lo más hondo cualquier injusticia cometida contra cualquiera en cualquier parte del mundo. Es la cualidad más linda de un revolucionario.
Un beso grandote y un gran abrazo de Papá
Esta es la carta con la que Ernesto Guevara de la Serna se despide de sus hijos. La escribió en algun lugar de la selva boliviana unos meses antes de morir.
La canción que pone banda sonora a la carta del Che es una muy buena versión de un tema original de Harry Chapin que los estadounidenses Ugly Kid Joe lanzaron en 1992.
La canción habla del poco tiempo que pasan juntos los padres con los hijos, primero por las obligaciones laborales de los padres y posteriormente porque los hijos comienzan a volar solos y a hacer su vida.
Me gustaría que esta entrada sea un homenaje a todos esos padres que dedican su vida a intentar hacer de sus hijos buenas personas y a todos esos hijos que son conscientes del esfuerzo de sus padres por convertirse en un modelo de honradez e integridad.
¡Salud y que podáis dedicar a vuestros hijos el mayor tiempo posible!
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