Una historia que fue contada por un soldado que pudo regresar a casa después de haber peleado en la guerra de Vietnam.
Le hablo a sus padres desde San Francisco:
Mama, papa, voy de regreso a casa, pero les tengo que pedir un favor, traigo a un amigo que me gustaría que se quedara con nosotros.
Hay algo que deben saber, el hijo siguió diciendo, él fue herido en la guerra; pisó una mina de tierra y perdió un brazo y una pierna. Él no tiene adónde ir, y quiero que se venga a vivir con nosotros a casa.
Siento mucho escuchar eso hijo, a lo mejor podemos encontrar un lugar en donde él pueda quedarse.
No, .....mamá ....papá.... yo quiero que él viva con nosotros.
Hijo, le dijo el padre, tú no sabes lo que estás pidiendo, alguien que está tan limitado
físicamente puede ser un gran peso para la familia.
Nosotros tenemos nuestras propias vidas que vivir, y no podemos dejar que algo como esto interfiera en nuestras vidas. Yo pienso que tú deberías regresar a casa y olvidarte de esta persona. Él encontrará la manera de vivir sólo.
En ese momento el hijo colgó el teléfono.
Los padres ya no volvieron a saber nada de él.
Unos cuantos días después, recibieron una llamada telefónica de la policía de San Francisco.... su hijo había muerto después de haberse lanzado desde lo alto de un edificio. Fue lo que les dijeron, todo apuntaba a un suicidio.
Los padres, destrozados por la noticia, volaron a San Francisco y fueron llevados para que identificaran a su hijo.
Ellos lo reconocieron; para su horror, descubrieron algo que no sabían, su hijo tan solo tenía un brazo y una pierna.
Encontré esta historia por internet y desconozco si es real o fruto de la imaginación de un autor desconocido. En cualquier caso pone de manifiesto el horror de las guerras y el sufrimiento que provocan en los que nada tienen que ver con sus orígenes ni sus causas pero que sufren, de manera inmisericorde, sus consecuencias.
Le pone banda sonora un tema de Deep Purple que habla de los sentimientos de un soldado que sobrevive a la guerra pero sufre el horror de lo vivido.
El tema está firmado por todos los componentes de la banda y destaca el gran trabajo vocal de Ian Gillan. Forma parte del cuarto disco de estudio de la banda, In rock en 1970. La versión que escuchamos hoy, se incluyó en el celebérrimo Made in Japan de 1972, considerado, a día de hoy, como uno de los mejores discos de rock grabado en vivo (desde luego aún sigue siendo uno de los más vendidos).
Como curiosidad, en el minuto 9:48 se escucha un ruido que, según cuentan, es un disparo. Al parecer un japonés se suicidó en pleno concierto cumpliendo su última voluntad que era escuchar esta canción antes de morir.
Otra versión más prosaica asegura que es el ruido de un foco o un amplificador al fundirse debido al calor. Lo cierto es que aseguran que cuando el público se marchó, apareció un cadáver tendido en el suelo.
Sea como fuere lo cierto es que es un auténtica joya de esta mítica banda británica que espero disfrutéis.
¡Salud, viva la música y mueran las guerras y los que las provocan!