miércoles, 9 de octubre de 2013

Wish you were here - Pink FLoyd



Cuando, hace casi cuatro años, comencé con el blog, ni en sueños hubiera pensado llegar a las casi 300 entradas que tiene actualmente. 

Mi única intención era, y sigue siendo, reunir un puñado de buenas canciones que, muchas por unos u otros motivos, forman parte de la banda sonora de mi vida y otras cuantas que me gustan especialmente, y compartirlas con todos aquellos que tengan a bien entrar en la bitácora del Comandante Ternura. 
 
Junto con las canciones incluyo algún poema, texto, extracto o cita relacionado de alguna forma con algún aspecto de la canción, unas veces más acertadamente que otras, o vierto algún comentario que me viene a la cabeza al escuchar la canción o relacionado con la actualidad, acompañando todo ello con alguna imagen que sirva de ilustración al poema, texto, frase o a la "neura" del día.

Según las estadísiticas de blogger, ( si lo dice blogger ¿quién soy yo para contradecirle? ) hemos alcanzado las 30.000 visitas y para conmemorar, celebrar, festejar (no sé si ninguna será la palabra adecuada) esa cifra me voy a permitir repetir una canción

Espero que comprendáis y perdonéis el "error" tratándose, muy posiblemente y en mi modesta opinión, de la mejor canción que se haya escrito jamás. 

En esta ocasión pongo el tema en directo, grabado en Londres en 1994 y que se publicó en el album "PULSE", editado un año después. 

Según cuentan los que saben de esto, el tema fué compuesto por Roger Waters y David Gilmour, en parte como homenaje al antiguo miembro de la banda Syd Barret que, aunque dejó definitivamente este mundo en 2006, ya se había ausentado de la realidad mucho antes. 

Espero que disfrutéis de este temazo y, si os apetece o no tenéis nada mejor que hacer y queréis alegraros o entristeceros con alguna canción, visitad regularmente al Comandante, y si hay suerte, puede que algún día de estos al sonar alguna canción, comience alguna revolución de las muchas que quedan pendientes... cosa que se agradecería siempre que sea para acabar con alguna injusticia de las muchas que se cometen en este, manifiestamente mejorable, mundo en que vivimos. 

Si no hay suerte, al menos, habremos pasado un rato agradable escuchando música y dando rienda suelta a nuestros sentimientos y emociones, porque seguro que todos alguna vez hemos pensado ¡Ojala estuvieras aquí!... 


No hay comentarios: