Esta canción del grupo Derek & The Dominos, se editó en 1970 y está firmada por Eric Clapton (Inglaterra, 1945) y Jim Gordon (USA, 1945). Incluida en el único álbum de estudio que grabó el grupo ("Layla and other assorted love songs"), es la prueba de que un riff de guitarra puede pasar a la historia.
Gordon era el batería del grupo, que además de Clapton contaba con el bajo Carl Radle y Bobby Whitlock en el teclado. En la grabación de este disco participó Duane Allman de los Allman Brothers.
Cuentan que la canción está dedicada a la mujer de George Harrison, Pattie Boyd, de la que Clapton estaba profundamente enamorado y con la que se casaría posteriormente.
En el año 1992, Clapton grabó el album "MTV Unplugged" e incluyó una nueva versión de la canción, más ralentizada y con nuevos arreglos.
"La primera vez que vi a Clapton fue con Cream, en el Café Au Go Go de Nueva York, en 1967, más o menos. Me quedé afuera. Las entradas estaban agotadas. No pude entrar. Pero podía verlos: la banda estaba al lado del vidrio. Y tocaba fuerte, se oía desde afuera. En esa época, Clapton era un hombre musicalmente salvaje. Se quedaba quieto, sin mover ni un músculo, mientras te entregaba lo más salvaje que habías experimentado jamás, al menos que hubieras estado en el estreno de la Obertura 1812 de Tchaikovsky en primera fila. Y cuando se juntaban su creatividad, su pasión, su frustración y su bronca, era de temer.
Para mí, "Layla" fue lo máximo: la voz, la composición y la guitarra estaban a un mismo nivel de intensidad. Es la interpretación más original que hace Clapton del blues, porque su ira allí tiene un rostro: el del amor no correspondido. El modo en que Clapton toca la guitarra sigue siendo magnífico. Hubo siete años en los que tocó la guitarra del modo más extraordinario e histórico, y treinta y cinco años de buen trabajo. Ser el mejor debe de ser desgastante.
Cualquiera que toque la guitarra líder tiene una deuda de gratitud con Clapton. Escribió el lenguaje fundamental, el código binario, el que todos usan hoy en todas las formas de la música popular. Puede que llegue el día en que, si sos un rockero joven, escuches una de las baladas suaves de Clapton en la radio y pienses: "¿Qué tiene de tan bueno?". Poné "Steppin’ Out". Y hacé una reverencia"
(Steve Van Zandt, músico, guitarrista de la E-Street Band; publicado en Rolling Stones en 2005, edición argentina)