martes, 28 de septiembre de 2010

Layla - Derek & The Dominos




Esta canción del grupo Derek & The Dominos, se editó en 1970 y está firmada por Eric Clapton (Inglaterra, 1945) y Jim Gordon (USA, 1945). Incluida en el único álbum de estudio que grabó el grupo ("Layla and other assorted love songs"), es la prueba de que un riff de guitarra puede pasar a la historia.

Gordon era el batería del grupo, que además de Clapton contaba con el bajo Carl Radle y  Bobby Whitlock en el teclado. En la grabación de este disco participó Duane Allman de los Allman Brothers.

Cuentan que la canción está dedicada a la mujer de George Harrison, Pattie Boyd, de la que Clapton estaba profundamente enamorado y con la que se casaría posteriormente.

En el año 1992, Clapton grabó el album "MTV Unplugged" e incluyó una nueva versión de la canción, más ralentizada y con nuevos arreglos.

"La primera vez que vi a Clapton fue con Cream, en el Café Au Go Go de Nueva York, en 1967, más o menos. Me quedé afuera. Las entradas estaban agotadas. No pude entrar. Pero podía verlos: la banda estaba al lado del vidrio. Y tocaba fuerte, se oía desde afuera. En esa época, Clapton era un hombre musicalmente salvaje. Se quedaba quieto, sin mover ni un músculo, mientras te entregaba lo más salvaje que habías experimentado jamás, al menos que hubieras estado en el estreno de la Obertura 1812 de Tchaikovsky en primera fila. Y cuando se juntaban su creatividad, su pasión, su frustración y su bronca, era de temer.
Para mí, "Layla" fue lo máximo: la voz, la composición y la guitarra estaban a un mismo nivel de intensidad. Es la interpretación más original que hace Clapton del blues, porque su ira allí tiene un rostro: el del amor no correspondido. El modo en que Clapton toca la guitarra sigue siendo magnífico. Hubo siete años en los que tocó la guitarra del modo más extraordinario e histórico, y treinta y cinco años de buen trabajo. Ser el mejor debe de ser desgastante.
Cualquiera que toque la guitarra líder tiene una deuda de gratitud con Clapton. Escribió el lenguaje fundamental, el código binario, el que todos usan hoy en todas las formas de la música popular. Puede que llegue el día en que, si sos un rockero joven, escuches una de las baladas suaves de Clapton en la radio y pienses: "¿Qué tiene de tan bueno?". Poné "Steppin’ Out". Y hacé una reverencia"

(Steve Van Zandt, músico, guitarrista de la E-Street Band; publicado en Rolling Stones en 2005, edición argentina)


jueves, 23 de septiembre de 2010

Maneras de vivir - Leño




No pienses que estoy muy triste    
si no me ves sonreir
es símplemente despiste
maneras de vivir.


Me sorprendo del bullicio
y ya no sé qué decir
cambio las cosas de sitio
maneras de vivir.

Voy cruzando el calendario
con igual velocidad
subrayando en mi diario
muchas páginas.

Te busco y estás ausente
te quiero y no es para ti
a lo mejor no es decedente
maneras de vivir.

Voy aprendiendo el oficio
olvidando el porvenir
me quejo sólo de vicio
maneras de vivir.

No sé si estoy en lo cierto
lo cierto es que estoy aquí
otros por menos se han muerto
maneras de vivir.

Descuélgate del estante
y si te quieres venir
tengo una plaza vacante
maneras de vivir.

"Yo soy socio de la SGAE, uno de los pocos estamentos que, se supone, defienden los derechos de los autores, y me siento protegido, y estoy con ellos. Pero entiendo que ahora todo ha evolucionado y hay una serie de historias contra las que es muy dificil luchar. También entiendo que no está bien que alguien que compra CD´s para grabar sus trabajos se le cobre un canon porque haya gente que piratee. Está claro que están cambiando los formatos. Internet se debería legislar un mínimo, porque yo no puedo decirle a nadie que no se baje música. Estoy convencido de que quien quiere tener un disco se lo compra. De todos modos, a mi el pirateo nunca me ha afectado excesivamente, de lo que vivo es de los directos. Nunca he vendido tanto para vivir de las ventas"
(Rosendo Mercado)

martes, 21 de septiembre de 2010

Canto a la libertad - José Antonio Labordeta



Compañeros, compañeros,
hasta aquí ya hemos llegado,
atrás dejamos la noche
con la violencia y el miedo.

Dejamos en los caminos
compañeros que no han vuelto,
que no han podido seguir
contra este brutal esfuerzo.

Qué larga ha sido la noche,
y el alba que tanto tarda:
salid al camino hermanos
que no amanece por nada,

y en nombre de los caídos
de los que nunca llegaron,
hagamos de su esperanza
tiempos de hombres renovados.

Vamos ahora, compañeros,
a defender lo alcanzado
a seguir hacia delante,
la lucha no ha terminado.

Defendamos los salarios,
los panizos y los ríos,
la igualdad entre los hombres,
las montañas y los trigos.

Qué larga ha sido la noche,
y el alba que tanto tarda:
salid al camino, hermanos,
que no amanece por nada.


(Letra de la canción "Compañeros" de José Antonio Labordeta)

¡¡Hasta siempre, profesor!!

martes, 14 de septiembre de 2010

Enola Gay - Orchestral Manoeuvres in the Dark





Sadako Sasaki, cuando estalló la bomba, no llegaba a los tres años de edad. Ese fatídico 6 de Agosto de 1945 se encontraba a un par de kilómetros del punto de impacto de "Little Boy". 

Nueve años después le fué diagnosticada una leucemia, que acabaría con su vida el 25 de Octubre de 1955.

Mientras se encontraba en el hospital, su  amiga Chizuko le habló de la tradición japonesa según la cual si haces mil grullas de papel, los dioses te conceden un deseo.

Chizuko le regaló una grulla que había realizado ella misma en papel dorado, y Sadako de dedicó a realizar grullas de papel mientras estaba en el hospital, anhelando llegar a las mil, para que los dioses le concedieran el deseo de que llegara la paz y la curación a todos los enfermos del mundo.

Cuando Sadako falleció había logrado confeccionar 644 grullas de papel y sus compañeros de clase decidieron que harían las que faltaban para llegar a las mil que Sadako quería.

Posteriormente pensaron en que se instalara un monumento a Sadako y lo que ella representaba. 

En 1958, en el Parque de la Paz de Hiroshima fué inaugurado un monumento que representa a Sadako con una grulla dorada en las manos. En la base del monumento puede leerse: "Éste es nuestro grito, ésta es nuestra plegaria; paz en el mundo.”


sábado, 11 de septiembre de 2010

Aquarius/Let the Sunshine In - The Fifth Dimension




En algún lugar de la India. Una fila de piezas de artillería en posición. Atado a la boca de cada una de ellas hay un hombre. En primer plano de la fotografía, un oficial británico levanta la espada y va a dar orden de disparar. No disponemos de imágenes del efecto de los disparos, pero hasta la más obtusa de las imaginaciones podrá 'ver' cabezas y troncos dispersos por el campo de tiro, restos sanguinolentos, vísceras, miembros amputados. Los hombres eran rebeldes. En algún lugar de Angola. Dos soldados portugueses levantan por los brazos a un negro que quizá no esté muerto, otro soldado empuña un machete y se prepara para separar la cabeza del cuerpo. Esta es la primera fotografía. En la segunda, esta vez hay una segunda fotografía, la cabeza ya ha sido cortada, está clavada en un palo, y los soldados se ríen. El negro era un guerrillero. En algún lugar de Israel. Mientras algunos soldados israelíes inmovilizan a un palestino, otro militar le parte a martillazos los huesos de la mano derecha. El palestino había tirado piedras. Estados Unidos de América del Norte, ciudad de Nueva York. Dos aviones comerciales norteamericanos, secuestrados por terroristas relacionados con el integrismo islámico, se lanzan contra las torres del World Trade Center y las derriban. Por el mismo procedimiento un tercer avión causa daños enormes en el edificio del Pentágono, sede del poder bélico de Estados Unidos. Los muertos, enterrados entre los escombros, reducidos a migajas, volatilizados, se cuentan por millares.
Las fotografías de India, de Angola y de Israel nos lanzan el horror a la cara, las víctimas se nos

lunes, 6 de septiembre de 2010

Won’t get fooled again – The Who




Ladies and gentleman, con ustedes.......... The Who.

Sería inconcebible leer una historia del cine en la que no se mencionara a John Ford, o una historia sobre la pintura en la que no se nombrara a Picasso. Si hablamos de música, es imposible tratar de publicar en un blog grandes canciones de la historia de la música del siglo XX, sin que al menos una entrada, corresponda a la banda inglesa de rock The Who.

Formada en 1964 en Londres, la composición inicial estuvo formada por Pete Townshend (guitarra), Roger Daltrey (voz), John Entwistle (bajo) y Keith Moon (batería). Townshend y Entwistle son los que han compuesto la inmensa mayoría de las canciones de la banda, que está considerada por todo el mundo una de las más influyentes, innovadoras y poderosas de la historia del rock.

Pete Townshend y Roger Daltrey son los únicos miembros originales de la banda que viven. Keith Moon falleció por sobredosis de pastillas en 1978 y  Entwistle sufrió un ataque al corazón en 2002.

En 1969 editaron el album Tommy, la primera opera-rock de gran éxito popular y posteriormente, en 1973, publicaron, la que sería su segunda incursión en el género, Quadrophenia. Ambos títulos fueron llevados al cine Tommy (1975, Ken Russell) y Quadrophenia (1979, Franc Roddam).

En 1982 publicaron su último disco de estudio y ese mismo año dieron su último concierto. Desde entonces ha tocado en algunas ocasiones especiales como el concierto Live Aid organizado por Bob Geldof  en 1985 y en 1989 dieron dos conciertos en Nueva York y Los Ángeles.

Algunas apariciones esporádicas en algunos conciertos benéficos han marcado la carrera de The Who en los últimos años, hasta que en 2006 salió Endless Wire, el nuevo album de estudio de la banda y desde entonces han realizado varias giras mundiales con gran éxito.

El tema que suena en la entrada es Won’t get fooled again, tema del album de 1971 Who's Next, y que actualmente es muy conocido por sonar en la cabecera de la serie de televisión C.S.I. Miami.

En resumen, escuchando The Who, suena un trozo de la historia de la música y del arte del siglo XX y del XXI, ...

jueves, 2 de septiembre de 2010

Hey, Joe – Willy Deville




Hey, Joe es una canción tradicional americana, compuesta en los años 60 y no parece muy claro quién es su autor o autores.

La primera grabación comercial que se conoce, data de 1965 y es de una banda de Los Angeles llamada The Leaves, y la versión más popular es, posiblemente la grabada por el grupo The Jimi Hendrix Experience en 1966.

Grupos tan diversos como The Offspring, O Rappa,  Robert Plank y Deep Purple tambien han grabado sus propias versiones del tema

Particularmente me parece que la versión de  Willy Deville que ilustra esta entrada es la mejor. Es una grabación del año 1991 y supuso todo un exitazo en la carrera del pirata del rock, con ese toque mariachi que le queda tan bien.

La canción narra la truculenta historia de un hombre, Joe, que se encamina a matar a su mujer para después huir a México, donde espera que no le encuentren.